1- Se limpia la piel exterior de la nariz con un algodón con alcohol.
2- Se colocan los parches autoadhesivos a ambos lados de las aletas de la nariz, un poco por encima de las fosas nasales.
3- Luego se apoya la banda que por efecto magnético se adhiere a los parches colocados. Permitiendo la apertura de las fosas nasales y el ingreso de mayor cantidad de aire a la nariz.